Dentro de los documentos objetivos que muestran las especificaciones de una motocicleta figura la ficha técnica de moto; en un primer encuentro, entenderla resulta un tanto complejo, requiriendo en algunos casos, uno que otro pequeño conocimiento para darle dimensión y sentido a los datos. Sin embargo, del entendimiento de la información ofrecida, depende en muchos casos, ahorrarse unos cuantos dolores de cabeza innecesarios.
Información precisa y necesaria
Sin distingo del modelo o de la marca, esta hoja es un resumen de las especificaciones de una moto, conteniendo los datos técnicos del vehículo así como sus características y descripciones. Entre la información suministrada se encuentran el peso, torque y potencia; asimismo, los detalles del motor, los frenos, la distancia entre ejes, e incluso la suspensión y la altura de asiento.
No existe un formato fijo, por lo que cada fabricante varía la información suministrada en ella tanto en lo que respecta a las dimensiones del modelo, como en los pormenores del chasis y de datos relativos al motor. Por esta razón, son instrumentos perfectos al momento de comparar opciones con alguna guía de motos cuando se valora la idea de comprar una moto.
Indispensable a la hora de asegurar una moto
La mayor ventaja de conocer la ficha técnica de una moto es que permite una mejor comprensión de su construcción; sin embargo, la información contenida dice igualmente mucho respecto a ciertas disciplinas, hardware de carrera, calidad y tecnologías, conocimientos muy valorados ante la posibilidad de decantarse por un modelo u otro.
Junto con el resto de la documentación, la ficha técnica de moto suele ser requisito esencial cuando se quiere contratar un seguro de motos, formando parte de los requisitos indispensables que solicitan las aseguradoras para corroborar la veracidad de los datos facilitados.
En revisiones de rutina o reparaciones, las fichas técnicas son de gran valor, aportando detalles que pueden servir ante la necesidad de reemplazar piezas dañadas, brindando la garantía de estar instalando las correctas u homologadas por el fabricante. De esta forma, permite mantener el óptimo desempeño del vehículo sin comprometer la seguridad.
